La vitamina D3 es una de esas vitaminas cuya deficiencia puede causar efectos graves. Los niños que no obtienen suficiente vitamina D3 en sus dietas tienen un mayor riesgo de desarrollar raquitismo, una enfermedad que causa malformaciones de huesos y dientes en los niños.
Los adultos con niveles bajos de vitamina D3 tienen más probabilidades de desarrollar osteomalacia (similar al raquitismo) y de sufrir osteoporosis, una enfermedad que debilita los huesos. Se puede utilizar ampliamente en suplementos medicinales, nutrición, aditivos alimentarios y para piensos, etc.